Exigente y duro, pero noble a la vez. La dureza y la determinación de la Rata se mezclan con la creatividad y la ternura de Escorpio. Son personas que, si se dejan guiar por la compasión típica de su signo helenístico, pueden resultar compañeros comprensivos, seres con los que es un placer transitar la vida. Pero si se dejan seducir por la ambición de la Rata, se vuelven despóticos y codiciosos. La pasión corre en sus venas siempre, y por eso resultan amantes muy fogosos: a travéz del sexo expresan no sólo el amor que sienten por el otro, sino también sus ganas de vivir.
Alguien a quien proteger. Las Ratas de Escorpio buscan construir un hogar lleno de amor, y quieren salir al mundo para cuidar y mantener ese hogar. Si encuentran a alguien que sea feliz quedándose en la casa, seguramente se mantendrán en el buen camino y terminarán siendo personas muy creativas y gentiles.
El agua es común en ambos signos. Para entender este signo, no hay que pensar en el agua como un elemento dócil, sino como una fuerza que avanza y avanza, como un río caudaloso, con una catarata. Jamás les faltará vitalidad a las Ratas de Escorpio.
Un Búfalo de Virgo. La seriedad de ambos los vuelve excelentes compañeros de vida. También pueden encontrar la felicidad con un Mono de Cáncer o un Dragón de Piscis.
Los Conejos y Caballos en general, que tienen necesidades totalmente diferentes a las de la Rata de Escorpio.