Emprendedor y algo ingenuo. La energía del Caballo hace que este signo sea un trabajador incansable. Sin embargo, la naturaleza leal y noble de Leo hace que se vuelva un poco ingenuo. Suele confiar demasiado en los demás, y cuando es engañado se lastima mucho. En el plano amoroso, el Caballo de Leo es puro ardor. Pero algo irresponsable e inconstante. No es la pareja más confiable. Se dedica mucho a su apariencia física y suele preocuparse mucho por su salud.
Pasión. Este signo es muy despreocupado y le cuesta mantener la atención en una sola cosa a la vez. Pero cuando se encuentra con alguien lleno de ardor y deseo, se vuelve loco. En estos casos, ama con locura y devoción, y es capaz de una lealtad de hierro.
El fuego (correspondiente al Caballo y a Leo). Tanta incandescencia crea una personalidad poco estable: para los Caballos de Leo, el amor es un subibaja. Estos fuegos se consumen entre sí y dejan solo cenizas, al menos que la pareja pueda mantenerle el ritmo, subir y bajar al mismo ritmo que él.
Los Perros y Cabras de Libra, Aries y Sagitario. Los Tigres de estos mismos signos también pueden ser una buena pareja para el Caballo de Leo.
Los Monos de Tauro y las Ratas de Acuario son totalmente antagónicos de este signo. Y tampoco se entiende con los Escorpio en general.